miércoles, 22 de febrero de 2012

ACLARACIÓN

En una entrada anterior, hablando sobre las elecciones generales y sobre, lo que a mi parecer, era la responsabilidad del voto, escribí la frase "hay veces que hay que votar con la nariz tapada para que no gobiernen los otros", y me gustaría aclarala, porque ha conmocionado a alguno de mis pocos lectores.

En primer lugar, me gustaría aclarar que no estoy de acuerdo con el bipartidismo que se ha asentado en la democracia española, y creo firmemente que debería modificarse la ley electoral para dar más peso a otros partidos. En mi caso, que tengo una ideología claramente de izquierdas, me gustaría que partidos como Izquierda Unida tuviese el número suficiente de escaños, no para gobernar, que me parece muy dificil, (y más como se van extendiendo ciertos colores por el electorado español), pero sí determinantes en el gobiernos, es decir, que tuvieran el poder suficiente para "ayudar" al PSOE a dar un giro a la izquierda. 

Dicho esto, creo que es necesario comentar un par de cosas. En primer lugar, no hay que olvidar, basta con ver los resultados electorales y los porcentajes de voto que obtiene cada partido, que, si bien parece que en estas elecciones ha subido ligeramente, el porcentaje de votos que obtiene el PP es siempre más o menos el mismos, es decir, que sus votantes son fieles a muerte y les van a votar pase lo que pase (en ocasiones "con la nariz tapada", frase que, por cierto tomé prestada de un votante popular refiriéndose a votar a Gallardón como alcalde de Madrid). La izquierda es más crítica  con sus representantes, si no me gusta lo que has hecho, no te voto. Y en esta línea iba mi frase al referirme a la responsabilidad del voto. 
Dado que el pueblo, de momento (ya vemos lo que ha pasado en Grecia, que han impedido realizar unas elecciones democráticas y han impuesto un presidente por la regla del 33, y si eso ha pasado en la cuna de la democracia, qué nos espera a los demás) tenemos la soberanía de elegir a nuestros gobernantes - representantes en el Congreso, creo que debemos tener la responsabilidad y la obligación de "procurarnos" un gobierno con orejas frente a la voz de la gente, expresada muchas veces a través de manifestaciones, y no un gobierno como es el popular, que son estatuas de granito sin orejas para escuchar o con oidos intercomunicados, de tal manera que lo que entra por uno sale por otro. Como no quiero que me acusen de demagoga, pondré algún ejemplo; en Madrid, las protestas de los profesores ante el acoso y derribo a la educación pública no sólo no han sido escuchadas, sino que no se ha dudado en recurrir al insulto y la descalificación de los docentes, tachandoles de vagos, de que entran a dedo (se ha confundido la pobre presidenta de la Comunidad de Madrid, entre los profesores que entran tras superar las durísimas oposiciones de secundaria con los que sí que entran a dedito en sus colegios concertados con sus amiguitos los curas), etc.  Otro ejemplo, lo ocurrido los últimos días en Valencia, donde las manifestaciones pidiendo unas conidiciones dignas y básicas, como son tener calefacción en un colegio público, se ha ninguneado, se ha mentido diciendo que el PSOE y la extrema izquierda estaban detrás, que los profesores aprobaban a los alumnos que se manifestaban, etc. por no decir que se ha justificado una acción policial, no solo brutal y desmedida, sino totalmente injustificada. Si es cierto que la orden viene de los políticos gobernantes son los que dieron la orden de las cargas, ¿estaremos ante un proximo cambio de imagen en la policía de España?, ¿los veremos en breve vestidos de gris?. Igual consiguen que los nuevos uniformes los haga el sastre de Camps. 
Desde luego sería una policía más acorde con este neofranquismo que estamos viviendo, donde, aparte de todos los derechos que se han cargado de un plumazo con este disparate de reforma laboral, estamos asistiendo a situaciones que nos deberían recordar a tiempos pasados, la censura campa a sus anchas en las televisiones autonímicas (como denuncian los comités de empresa de las mismas, como en Telemadrid, cada dos por tres, o Canal 9 en Valencia, por el tratamiento que les han obligado a dar de los incidentes acontecidos), no tenemos el NODO, pero está Intereconomía para gritar al viento las consignas del partido, y Jimenez Losantos, con quien siempre se puede contar para escuchar algún disparate; la libertad de expresión se está viendo amenazada, ayer en el Congreso de los Diputados, donde a los grandes partidos mayoritarios se les ha olvidado que los demás representantes también son la voz de muchos españoles, se impidió hablar de las manifestaciones en Valencia y la incalificable actuación de la policía, en Madrid se impidió, bajo riesgo de ser arrestado, acudir a votar con las camisetas verdes de apoyo a la escuela pública, que, por lo que yo sé, ya que, por supuesto tengo una, no pide el voto para ningún partido, que es lo que atentaría contra la ley electoral, no, pero hacen algo mucho peor, ofenden los ojillos de la caudilla que gobierna la Comunidad de Madrid, con mano de hierro, no se le vayan a subir los rojos a la chepa. 

La "derrecha sin complejos" cree que va a poder con los que no pensamos como ellos y para ello no están dudado en recurrir a métodos que creíamos superados, pero parece que no. Pero no van a poder acallarnos, animo a todo el mundo que piense como yo y como mucha otra gente que no dude en expresarlo ante ellos, que entren en debate y defiendan sus ideas. Somos nosotros los que no tenemos que tener complejos, porque nuestras ideas van dirigidas a pretender la igualdad de oportunidades entre todos, que todos los niños puedan acceder a una educación de calidad y no sólo los que puedan pagarla, que todos los ancianos puedan acceder a las ayudas a la dependencia y no sólo los que puedan pagarla, que los impuestos se suban, sí, pero de forma progresiva con mayor carga a las rentas más altas, etc. Nuestras ideas son buenas y tenemos algo que ellos no tienen (por lo menos yo no los veo, ni cuando debaten conmigo, ni en Intereconomía, etc) que son argumentos. Lo que si tienen son muchos crímenes contra la humanidad sobre los que dar explicaciones, ya que se han erigido en los herederos del franquismo, que todavía tiene muchos muertos en las cunetas. Quizás, si pensaran, se darían cuenta de que sí que tienen que tener algún complejo.

viernes, 10 de febrero de 2012

¿Cómo se lo explico a mis hijos?

Tengo dos hijos pequeños, uno de cuatro años y otro de 19 meses. Intento educarles siguiendo tres principios básicos:
  1. En primer lugar, quiero educarles para que sean felices. 
  2. En segundo lugar, quiero educarles para que sean honrados.
  3. En tercer lugar, quiero educarles para que tengan espíritu crítico ante las cosas. 
Que sean felices con lo que son, con lo que quieran hacer, con las elecciones que tomen. Que sean consecuentes con ellas y que aprendan de sus errores, que no se martiricen con ellos, ni pongan en ellos su autoestima ni valía personal. Que sean felices de ser quienes son, porque son muy, muy especiales.

También quiero que aprendan a ser honrados, honestos, sinceros, respetuosos con los demás. Dice el Dr. Mario Rosén, médico, educador y escritor, que en su casa le enseñaron tres valores fundamentales y, tras leer su artículo, me reafirmo en mi idea de educar a mis hijos en ellos: justicia, piedad y no ser insolente.
Justicia porque el que hace una mala acción tiene una mala consecuencia, igual que quien hace una buena acción tiene un reconocimiento y una alabanza. Piedad porque, según sus propias palabras, cuando uno debía cumplir un castigo como consecuencia de una infracción "uno cumplía la condena estipulada y era dispensado, y su dignidad quedaba intacta y en pie." y, finalmente, no ser insolente, porque el que incumple las normas, el que transgrede las reglas tiene que bajar la cabeza ante la sociedad y pedir perdón, no responder con insolencia. El Dr. Rosén pone el ejemplo de un ciudadano que tira un papel al suelo y que, cuando se le recrimina su actitud, además responde con insolencia, pero seguro que se nos ocurren muchos más ejemplos.
Lo que no sé es cómo explicarle a mis hijos que estas enseñanzas que les doy, porque pienso que son las mejores que les puedo dar, no les van a servir para nada en el mundo real. ¿Cómo les explico, por ejemplo, lo que ha pasado con el juez Garzón?, ¿Cómo les digo que la persona que ha demostrado tener la honestidad y la valentía de perseguir la corrupción está condenada a 11 años de ihabilitación, mientras que los verdaderos delincuentes, los verdaderos ladrones, están libres y exhibiendo su insolencia por los platós de televisión?, me refiero, por supuesto al Sr. Camps. No sólo hemos podido asistir todos al bochornoso espectáculo del juicio y a las escandalosas escuchas en las que quedan más que claros los delitos cometidos con clara referencia al intercambio de favores y regalos; sino que ahora tenemos que soportar la insolencia y la soberbia de dicho personaje, que exhibe su "inocencia" por los platós de cadenas afines. Me siento insultada, en mi inteligencia y en mi librepensamiento (del que hablaré después). Se pregunta Dolores de Cospedal quién le va a restituir la honorabilidad perdida a Camps. Señora mía, lo que no se ha tenido nunca no se puede restituir. Al juez Garzón, sin embargo,  no hace falta que nadie le restituya nada, porque nada ha perdido; su honorabilidad sigue intacta porque el proceso no tiene ni pies ni cabeza y sí un repelente tufillo a revancha, venganza, persecución o como quiera decirse, además de haberse garantizado que nadie más se atreva a investigar la corrupción, claro, sobre todo si los imputados pertenecen al todopoderoso PP. Además, tiene peor pinta si lo miramos en conjunto con el otro proceso al que está siendo sometido. Comenta el portavoz de Amnistía Internacional, que es la primera vez que ve a un juez que investiga crímenes contra la humanidad (sí señores del PP, Intereconomía y demás herederos, lo que hizo el "abuelito" fueron crímenes contra la humanidad) está sentado en el banquillo por los verdugos (de los que son herederos "Manos limpias"). Pero así es ESPAÑA, el mundo al revés, los honestos condenados, los ladrones libres, los valientes, los defensores de las víctimas,  en el banquillos, los asesinos, los verdugos, acusando.
Ante este panorama, agradezco que mis hijos sean pequeños y no tener que explicarles esta situación, porque me resultaría muy dificil hacerles entender que, aunque en este mundo descolocado no lo parezca, esos valores son buenos, son necesarios, son los que tienen que ser, aunque los que disfrutan de mayores riquezas y mayor defensa en la sociedad, sean los que no los practican.

El último valor que me gustaría transmitirles a mis hijos es el de la actitud crítica y el pensamiento libre. El otro día, en el programa "Salvados" de la sexta, José Luis Sampedro dijo que la gente, actualmente, primero asume las ideas que les imponen los gobernantes y luego reflexionan sobre ellas. Yo quiero que mis hijos aprendan a hacer lo contrario, de esa forma no se dejarán engañan como le está pasando a la población española a raiz de la crisis; ¡qué bien le ha venido la crisis a los poderosos para sembrar el miedo e imponer las ideas que ellos quieren y que, por supuesto, no benefician a los ciudadanos, sino a ellos mismos!. El programa "El Intermedio", reflejó muy bien la situación cuando hizo una encuesta en la calle preguntando a la gente si prefería que le cortaran una pierna o las dos. Todos contestaban que una, así por lo menos, tendrían la otra. Eso es lo que nos están haciendo, nos están convenciendo de que es bueno que nos quiten los derechos sociales a cambio de un simulacro de trabajo con un sueldo irrisorio, del que te pueden echar sin contemplaciones y, por supuesto, sin indemnización que valga. Al final nos acabarán cortando las dos piernas y nos venderán que hemos tenido suerte porque todavía conservamos la cabeza, claro que, para lo que la usamos nos daría igual tenerla o no, porque la intención del voto del PP sigue subiendo. Sin comentarios.
Espero que mis hijos no caigan en esa trampa, que usen sus neuronas, que se den cuenta de que este mundo es injusto, que los poderosos son los que más injusticias cometen y que tengan el valor de luchar contra ello, aunque el destino de los valiente a veces no sea muy halagüeño (¿verdad juez?),porque con todo el revuelo que se monta por parte de los gobernantes populares y sus secuaces de la Santa Iglesia Católica cada vez que se habla de la educación sexual a los jóvenes, a mí me resulta mucho más dificil y mucho más escandaloso tener que explicarle a mis hijos que en Grecia, hay niños como ellos que no pueden comer, porque 5 poderosos hombres del mundo han decidido que hay que hundir Grecia para que ellos puedan hacerse más ricos.